TRADICIÓN CELTA

  Superstición Celta

Es una superstición muy antigua de origen celta. 
Para los celtas los bosques eran muy respetados y sagrados, los llamaron Nemeton, en algunos bosques habían varias especies de árboles, en otros hay especies que son dominantes como en los encinares donde la encina esta presente en un gran porcentaje, la encina era el árbol donde vivían los dioses, para los Celtas los bosques eran sus templos y la encina el altar principal, donde los druidas realizaban sus ritos y ceremonias dedicados a sus dioses; los bosques eran densos y oscuros, las copas de los árboles inmensos, llenos de ramas colgantes, musgos acumulados de años, oscuros, por lo que daban temor, mucho respeto y les daban un ambiente de misterio; estaba prohibido cortar o talar un árbol, luego se crean las leyendas de que estaban habitados por seres divinos como gnomos, ninfas, diosas y dioses; de todos los árboles el roble era muy apreciado por tener una madera muy maciza y fuerte, pero la encina era la escogida por los Druidas para realizar sus rituales, por ser la más apreciada por sus bondades.
Los celtas estaban ligados a la tierra a la que la tenían como lo más sagrado y a los árboles que reciben las energías del sol, de la luna y de la tierra a través de sus raíces, las convertía en milagrosas y hasta mágicas, por lo que tocar su madera atraía las buenas vibras, algunas veces soltamos la expresión "toco madera" como repelente al peligro, contra lo que se cree que es mala suerte, de esa forma mencionamos en forma subliminal a la encina.      
Los celtas abrazaban a los árboles para inyectarse energía, rodeaban a los árboles para realizar sus ceremonias y posteriormente para realizar reuniones importantes, incluso los consejos de los algunos pueblos de Aragón, España, actualmente realizan sus consejos alrededor de una encina,
La costumbre al no estar cerca de un árbol, es tocar madera de los muebles e incluso algunas personas llevan un pequeño trozo de madera colgado al cuello, como dije de un collar; tocar la madera era para alejar las enfermedades y atraer la protección; muchos escritores e historiadores confunden a la encina con el roble, siendo los dos del mismo genero: Quercus; el roble es el de mayor abundancia dado que tiene varias especies, el roble es "quercus robus" y la encina "Quercus Ilex", pasando el roble a ser un genérico, incluso la encina es llamado o traducido al inglés "oak" como el roble,

ENCINA

                                                          Kaerquez


La encina (Quercus Ilex) es el árbol divino y sagrado, adorado por los Celtas que la llamaban Kaerques o Kerkes que significa árbol hermoso.
Los Celtas tenían una religión con muchos dioses y sus centros de adoración eran los bosques llamados Nemeton, especialmente los que estaban constituidos por los de la especie Quercus, los que están conformados aproximadamente por 150 variedades y solo la mitad, unas 70 están en Europa, entre ellas uno de los mas representativos es el Quercus Oak o roble, siendo uno de los más conocidos y populares para todo tipo de uso, también pasa a ser un nombre genérico y las otras variedades de Quercus son llamadas robles, en este caso son confundidos con las encinas, las que eran las más importantes para los Druidas que las buscaban, de preferencia las más viejas y sobre todo si tenían sobre su tronco y ramas el muérdago, planta parásita a la que le atribuían poderes mágicos y curativos. 

Los sacerdotes celtas eran llamados Druidas, palabra cuya etimología es:
- Deru: encina.
- Wid: saber, conocimiento.
Es decir Druida significa: "los que conocen la encina" y los rituales se realizaban sobre la encina
La encina estaba relacionada con varios dioses celtas. Tarannis. Brigit y Dagda que llevaba un hacha de madera de encina con la que abría el umbral entre el mundo superior e inferior.

DOLMEN

                 LOS CELTAS Y LOS DOLMENES 

El dolmen es un monumento megalítico, 
formado por lozas de piedra que eran utilizados como altares.
Dolmen significa: "Mesa grande de piedra".
Consiste en 2 o 3 piedras verticales y una horizontal en la parte superior, sostenida por las verticales.

Los dólmenes, son piedras brutas, no elaboradas y por consiguiente, no manchadas por la mano del hombre; la encina era considerada por los druidas como el árbol sagrado y el mismo título daban al muérdago, que les servía de emblema. 

A menudo se confunden las alineaciones de piedras druídicas con cementerios antiguos, cuando en verdad se trata de alineaciones circulares que forman puntos mágicos, siempre junto a una encina.
Junto a una encina del bosque y en orden perfecto están dispuestos menhires y dólmenes, cuyo sentido, los cabalistas comprenden inmediatamente. 
El paisaje y el ambiente no parecen de un sitio tan cercano a la capital. 
A distancia de una "dreve", en medio de un bosquecillo, se presenta un conjunto de piedras que hacen pensar en los tiempos prehistóricos.

La piedra de comando corresponde a Júpiter, el Gran Señor del Cielo, el que forja los jefes. 
La encina es simbolizada por Venus que efectúa la unión entre los mundos, (es el astro similar a la Afrodita de los Griegos). 
El Sol, materializado por el menhir, es el punto de partida del sistema. 
Marte (el Eso de los galos), astro que crea la división, la piedra del ara, es el dolmen D (primera piedra de base). 
Saturno, inherente al maleficio, es el 2o. dolmen de base, D, formando así la pareja de la santificación. 
Las dos piedras de equilibrio, E y E', son caracterizadas por Mercurio, el intelecto, y por la Luna, la intuición, asimismo por el razonamiento y el impulso, en el equilibrio de la mesa de expresión del menhir.
Junto a una encina del bosque y en orden perfecto están dispuestos menhires y dólmenes, cuyo sentido los cabalistas comprenden inmediatamente.

CELTAS EN IBERIA

                              Celtas en Iberia

 

 
Los celtas llegaron hacia el 1200 a. C. a Europa y entre el 900 al 400 a C. a la Península Ibérica y compartieron el territorio con los iberos.
Loa Celtas adoraban a los bosques, fuentes y en espacial a la ENCINA. Los druidas (sacerdotes celtas) donde se realizaban los ritos o donde se debatían asuntos importantes de la tribu, lo llamaron “Kaërquez”, que significa árbol hermoso y si la encina era el árbol sagrado, el muérdago, la planta parasita que crece sobre la encina era considerada como la piedra filosofal ya que en el muérdago encontraban remedio para prácticamente todo, la utilizaban tantos en ritos mágicos como en medicina.

Los Celtas llegaron a Europa  y ocuparon varias áreas, entra ellas la Península Ibérica, donde encontraron el árbol que llamaron Kaerquez, que en el idioma celta quiere decir "árbol hermoso", dicho nombre traducido al latín es Quercus, nombre que utilizaron los Romanos para llamar así al árbol hermoso de los Celtas.

Los sefes y cempsos pueblos celtas se encontraban en el sudoeste de la península en el siglo V según cuenta Herodoto

- Bebrices o Beribraces residentes en el península y sur de Francia

- Los Urdenfelder invaden Iberia en el 900 a. de C. y se asientan en Aragón, en los pueblos de la montañas catalanas

- Por l siglo VI a. de C. otra invasión celta pasa a la Rioja y Soria

- La tercera invasión toma el Tajo portugués y en España llegan a Extremadura, Andalucía, Huelva, Sevilla y Málaga

- Los Cimbrios dieron nombre a Cembricum (Cádiz) y Eburones a Eburra (Evora) Portugal.

- En una cuarta invasión llegan los turonis, nemetatis, boios, santonis, y nemetatis, bituriges y volcos invaden León, Astirias y Galicia, también Portugal.